El médico burgalés Emilio Sastre destacó hoy en Burgos “que la Fundación Mayo Rey ha conseguido mucho más de lo que se propuso” en el año 2008 cuando, “echó a andar desde la ciudad de Burgos con las pocas manos que había con la idea de hacer una Medicina mejor y más humana en Camerún, África”. “En los últimos 15 años de vida, se han sumado a este proyecto 346 sanitarios. Profesional médico y enfermero que viajó en un primer momento desde la provincia de Burgos y que hoy ya lo hace desde hospitales y complejos de todo el país para ayudar a quienes menos tienen.
Sastre pronunció esta tarde en la sede del Colegio de Médicos de Burgos la charla ‘Medicina Solidaria. Fundación Mayo Rey’, dentro del Ciclo ‘Charlas Divulgativas de Salud’, que vuelve a reunir cada mes a profesionales médicos y a decenas de burgaleses en el Salón de Actos del Combu con entrada libre hasta completar aforo. La doctora Nuria Gajate fue la encargada de presentar al doctor Sastre y de reconocer «la gran labor que ha desarrollado».
Desde 2010 para «ayudar a quienes lo necesitan»
En esta ocasión, el pediatra- muy conocido por su labor en el servicio de Neonatos del Hospital de Burgos- expuso a los participantes “la gran aventura” emprendida por “un loco de la Medicina al que se le ocurrió que la Medicina tenía que ayudar a las personas que menos tenían”. Así arrancó la Fundación Mayo Rey, que en el año 2010 construyó gracias a sus benefactores y a su patronato un hospital en la región camerunesa de Mayo Rey para dar cobertura sanitaria a cerca de 8000 habitantes que hasta entonces “no tenían recursos ni para operarse de una cesárea o una fractura de fémur”.
Con impulso, tesón y mucha energía, Sastre y un grupo de colegas médicos iniciaron una labor que ha permitido a la población local africana poder costearse tratamientos “a un precio simbólico” en un complejo entorno “donde si no tienes dinero no te operas ni de una catarata, una fractura de cadera o no ves nacer a tus hijos”, sentenció.
Del 2010 a la fecha, se ha constituido un importante hospital de referencia en el que se realizan cirugías y tratamientos de distinta naturaleza, “gracias al tesón y a la implicación de muchos médicos y enfermeros burgaleses, castellano y leoneses y de otros puntos del mapa”, aseveró Sastre, que celebra que hoy la Fundación Mayo Rey cuente con voluntarios sanitarios de todo el país que van desde Castilla-La Mancha, Navarra o Galicia a este hospital de África.
“Medicina para todos”
Si de algo está orgulloso Sastre y su equipo es de haber conseguido que “la Medicina tenga sentido” permitiendo el acceso a operaciones y cirugías complejas a personas “con pocos recursos” que “nunca se hubieran permitido pagar lo que allí está al alcance de muy pocos”.
En concreto, recuerda cómo “nos sorprendió cuando llegamos aquí como había muchas personas inválidas o discapacitadas totales por un accidente de tráfico que se hubiera solucionado con una operación de fémur o de tibia. Algo que en España es rutinario allí era totalmente discapacitante de por vida”, aclaró.
En estos años, y pese a las exigencias de la pandemia de Covid y la compleja realidad sanitaria, los médicos que apoya a la Fundación han seguido “como se ha podido” al pie del cañón. Así, durante 2022 ya se recuperó en parte esa normalidad perdida en los años 2020 y 2021 realizando las operaciones y tratamientos que quedaron en el aire, y de los que dependía “que alguien andara, viviera o muriese”, aseveró.
El doctor Emilio Sastre, jefe del Servicio de Neonatos del Hospital Universitario de Burgos (HUBU) hasta su reciente jubilación, ha puesta en marcha un hospital pediátrico en la población Rey Bouba, perteneciente a la provincia de Garoua, en el norte de Camerún.